El cabotaje terrestre es un método de transporte terrestre en el que se cargan y descargan mercancías entre dos puntos de un mismo país. Sin embargo, esta operación la realiza una empresa establecida fuera de este territorio nacional. Este concepto se aplica en particular en España, donde las empresas establecidas en un país miembro de la Unión Europea o del Espacio Económico Europeo están autorizadas a realizar cabotaje por carretera, siempre que se cumplan determinadas condiciones.
Esta práctica estratégica está concebida como una extensión del transporte internacional. Su objetivo es optimizar las rutas de entrega evitando los trayectos en vacío.
¿Por qué establecer el cabotaje?
El transporte por carretera es un sector altamente competitivo y regulado en el contexto de la liberalización del mercado. El cabotaje se destaca como una solución estratégica con múltiples ventajas:
- Ventaja económica tangible para los operadores de transporte, que pueden optimizar el uso de sus flotas reduciendo los costes de funcionamiento en vacío. Esta eficiencia operativa repercute directamente en los márgenes de beneficio.
- Reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero, al tener que realizar menos viajes.
Para los clientes de las empresas de transporte, las ventajas logísticas son innegables:
- El cabotaje aumenta la flexibilidad y la eficacia en la gestión de los envíos;
- Permite una rápida adaptación a las necesidades del mercado.
El resultado es una mejora significativa del servicio al cliente, factor clave para destacar en un mercado del transporte globalizado. Las consecuencias económicas y ecológicas son evidentes.
¿Cuáles son las diferentes formas de cabotaje?
El cabotaje adopta varias formas, cada una de las cuales responde a necesidades y contextos específicos. Se distingue entre el cabotaje nacional e internacional.
Cabotaje nacional: reglamento CE
Se refiere a las operaciones de transporte realizadas íntegramente dentro de las fronteras de un país por una empresa extranjera. Esta práctica se rige por una estricta normativa nacional destinada a equilibrar las oportunidades entre transportistas locales y extranjeros. Es la condición para garantizar una competencia leal.
El cabotaje terrestre en España
El cabotaje terrestre en España es sujeto a una serie de regulaciones específicas:
- Requisito de transporte internacional previo: Debe haber un transporte internacional previo que provenga de un país de la Unión Europea o de un tercer país, con una descarga en un Estado miembro diferente al de carga y origen (conocido como el Estado de acogida).
- Número máximo de transportes de cabotaje: los transportistas pueden realizar un máximo de tres operaciones consecutivas de cabotaje después de un envío internacional desde otro Estado de la Unión Europea o un tercer país con destino al Estado de acogida.
- Plazo para el cabotaje: A partir de la última descarga en el Estado miembro de acogida, se dispone de un plazo de 7 días para completar la última descarga en el curso de un transporte de cabotaje.
- Descargas permitidas: Se permite una descarga de mercancías por país miembro de la Unión Europea dentro de los tres días desde la entrada en el territorio.
Servicios discrecionales:
Los transportes de cabotaje terrestre que se realicen como servicios discrecionales deben cumplir con la obligación de llevar una hoja de ruta, la cual debe acompañar al vehículo durante toda la realización del servicio.
Esta hoja de ruta debe ser completada en doble ejemplar por el transportista o el conductor antes de cada viaje.
El modelo de la hoja de ruta para el transporte de cabotaje terrestre, tanto para servicios discrecionales como para servicios regulares especiales, está establecido en el Reglamento (UE) nº 361/2014 de la Comisión de 9 de abril de 2014.
Cabotaje internacional: normas de transporte
El cabotaje internacional, por su parte, permite a las empresas de transporte de un país realizar operaciones de entrega en otro país, tras una operación de transporte internacional por carretera. Esta forma de cabotaje está especialmente extendida en la Unión Europea, donde la normativa pretende fomentar la eficacia y la integración del mercado europeo.
Estas diferentes formas de cabotaje tienen la ventaja de ser adaptables a las realidades regionales e internacionales, así como a las políticas comerciales de las empresas. Facilitan el comercio y la distribución en un mundo cada vez más interconectado.
¿Quién establece el cabotaje?
El cabotaje por carretera implica a varios actores clave que actúan en el marco de la organización del transporte:
- Los transportistas terrestres y los conductores están en el centro de esta dinámica, percibiendo el cabotaje como una oportunidad estratégica para optimizar el uso de su flota y aumentar su rentabilidad;
- Los clientes empresariales se benefician del cabotaje a través de una logística más eficiente y unos costes de transporte más bajos;
- Las autoridades reguladoras también desempeñan un papel regulador en este proceso. Garantizan el cumplimiento de las normas establecidas, con el fin de preservar la equidad y la legalidad de las operaciones de cabotaje. También garantizan la protección de los mercados locales y la promoción de prácticas comerciales honestas
Transporte de mercancías: ¿qué legislación es necesaria para el cabotaje?
La legislación sobre cabotaje por carretera en la Unión Europea se rige por normas específicas. Se han establecido para regular el transporte de mercancías entre dos puntos de un territorio nacional por una empresa de transporte por carretera no residente.
Por ejemplo
En Francia, una empresa de transporte no establecida puede realizar hasta tres operaciones de cabotaje en un plazo máximo de siete días, tras un viaje internacional a Francia como el mencionado anteriormente.
Esta normativa forma parte de un planteamiento más amplio. Su objetivo es liberalizar gradualmente el transporte internacional de mercancías por carretera y el cabotaje, tal como estipula el artículo 91 del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea.
Para su información
Las operaciones de transporte internacional por carretera están plenamente liberalizadas en la UE. No obstante, el cabotaje sigue sujeto a restricciones. Éstas se establecen en el Reglamento (CE) nº 1072/2009 del parlamento europeo. Estas normas se han actualizado y son aplicables desde el 21 de febrero de 2022.
Esta normativa establece un equilibrio entre la liberalización del mercado y la protección de los mercados locales. Promueve la eficiencia y la competitividad en el sector del transporte por carretera dentro de la Unión Europea.
¿Cuáles son las sanciones por incumplimiento?
Se considera una infracción muy grave de la normativa de transporte, sancionada con una multa de 4.000 euros. Esta multa se aplica tanto al transportista extranjero como a la empresa española que lo haya contratado, con la misma cuantía para ambos.
Dado que el camión está matriculado en el extranjero, el pago de la multa debe ser inmediato, ya sea por el propio transportista extranjero o mediante un procedimiento de caución y depósito del dinero por empresas autorizadas en España para realizar esta función.
Además, la sanción incluye la inmovilización del vehículo y la prohibición de realizar transporte interior en España para el transportista extranjero.
Cabotaje y uso de software TMS (Shiptify)
La integración de un software de gestión del transporte (TMS) como Shiptify transforma radicalmente la gestión del cabotaje. Esta avanzada herramienta digital facilita la optimización de las rutas.
- Es una solución que ofrece a los cargadores la oportunidad de optimizar las rutas a través de la eficiencia de sus operaciones de cabotaje;
- Shiptify también controla la gestión de la carga y garantiza un uso óptimo de la capacidad de transporte;
- Otra gran ventaja es su capacidad para realizar un seguimiento de los envíos.
- Así que juega la carta de la transparencia total para una mejor comunicación con sus clientes;
- Por último, ya no tendrá que preocuparse por el cumplimiento de la normativa, porque la solución se encarga de ello con actualizaciones.
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El cabotaje terrestre es una solución muy prometedora para las empresas de transporte. Combina brillantemente la eficiencia económica, la responsabilidad medioambiental y la flexibilidad logística. Su uso, que se rige por una normativa específica, requiere una gestión meticulosa adaptada a los requisitos modernos del sector.
Por eso, el uso de software TMS se está convirtiendo en una palanca estratégica. Facilita la optimización de rutas, la gestión precisa de la carga, el seguimiento en tiempo real y el cumplimiento sin fisuras de la normativa. Conéctese a Shiptify para obtener más información e iniciar su viaje hacia una gestión del transporte más eficiente y conforme a la normativa.
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